El origen del contenedor marítimo se remonta a después de la Segunda Guerra Mundial. En aquel entonces, un joven camionero de Carolina del Norte, Malcom McLean, se dio cuenta del enorme esfuerzo y tiempo que se empleaba en cargar las mercancías desde los camiones a los barcos.

McLean tuvo una gran idea que, con el tiempo, marcó un antes y un después en el transporte. Desarrolló su proyecto y optimizó los procesos cargando directamente los remolques, en una primera etapa, para después acabar quitando el chasis y cargando únicamente la caja metálica.

Tras la expansión del uso de los contenedores, se estandarizaron las medidas para simplificar la labor de carga y descarga. En 1961, la estandarización llevó al desarrollo de una norma internacional llamada ISO (International Standards Organization) shipping container. Estas normas no son obligatorias, pero estandarizar ha sido vital para la evolución en el manejo de los contenedores.

Tipos de contenedores

Con el paso del tiempo, y para adaptarse a las necesidades del comercio internacional, se ha desarrollado una amplia tipología de contenedores. En función de sus medidas, los más usados en el transporte marítimo de mercancías son el de 20 pies (5,9m de largo x 2,3m de ancho x 2,3m de alto con una carga máxima recomendada de 21,8t) y el de 40 pies (12m x 2,3m x 2,3m con una carga máxima recomendada de 26,7t). Además de estos, los tipos de contenedores según sus dimensiones son:

  • Estándar de 20, 40 y 40 pies HC
  • Open top de 20 y 40 pies
  • Refrigerado de 20 y 40 pies
  • Ventilado de 20 pies
  • Flat rack de 20 y 40 pies
  • Tanque de 20 pies
  • 45 pies HC

Según sus características y carga, los contenedores más habituales son los siguientes:

  • Contenedor cerrado (dry container). El más usado del mundo. Fabricado en aluminio o acero, de 20 o 40 pies, se trata de un contenedor de carga seca para todo tipo de mercancía. Cerrado y con paredes rígidas, cuenta con una puerta para introducir la mercancía
  • Contenedor frigorífico (reefer container). De 20, 40 y 45 pies, se usa para mercancías que necesitan condiciones de temperatura controlada (entre -25º y +25º) como frutas o productos cárnicos. Dispone de una unidad de refrigeración que se conecta a la red eléctrica del barco, del puerto o de los camiones.
  • Contenedor plataforma (flat rack container). De 20 o 40 pies, está hecho en acero y no tiene paredes. Con laterales fijos o abatibles, es el más indicado para material pesado o que requiere de una carga especial por sus dimensiones como, por ejemplo, las tuberías.
  • Contenedor sin techo (open top container). De 20 o 40 pies, se caracteriza por no tener techo o contar con un techo removible de lona. Habitualmente tienen puertas laterales para facilitar la carga y descarga; y se usa para materiales pesados o de grandes dimensiones.
  • Contenedor de acceso lateral (open side container). De 20 o 40 pies, se fabrica en acero y se usa para mercancías de grandes dimensiones (longitud). Está diseñado para facilitar la carga por las puertas laterales. También existen los Double Door, con puertas de cuatro hojas para acceder a la carga por laterales y extremos.

Además de estos, la clasificación incluye otros tipos:

  • Cisterna o tanque (tank container). De acero o aluminio, tiene forma cilíndrica y va anclado a unas vigas de acero con la forma y dimensiones de un contenedor estándar, lo que facilita su manejo. Se usa para gases o líquidos.
  • Isotermo (insulated container). Hecho con materiales aislantes se emplea para mercancías que necesitan una temperatura constante.
  • Granelero (bulk container). Para el transporte de grano o mercancías a granel, tiene tres escotillas de carga en la parte superior y dos trampillas de descarga en la puerta.
  • Gran capacidad (high cube container). De 40 o 45 pies, son muy similares al dry container, pero con mayor altura. Se usa para cargas ligeras y voluminosas.
  • Otros: hipobárico, jaula, de automóviles, etc.